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28 de agosto | 2023
El aprendizaje interactivo es una forma efectiva de enseñanza que fomenta la participación y el compromiso de los estudiantes. Implementarlo en el aula puede hacer que las clases sean más interesantes y divertidas, desarrollando habilidades importantes para la futura vida laboral y personal. ¿Quieres saber cómo aplicar el aprendizaje interactivo en el aula? Encuentra aquí 9 actividades o estrategias para empezar a hacerlo.
Sin embargo, es posible que también te surjan dudas. ¿Será demasiado trabajo adicional? ¿Realmente vale la pena? No te preocupes, te explicamos los beneficios de este enfoque educativo y cómo superar posibles obstáculos tanto técnicos como de tiempo. Aprende cómo hacer que tus clases sean más dinámicas, estimulando el pensamiento crítico e involucrando a tus alumnos en un aprendizaje significativo.
Sigue leyendo y descubre cómo el aprendizaje interactivo puede revolucionar la experiencia educativa en tu aula.
El aprendizaje interactivo incentiva a los alumnos a participar en actividades colaborativas, utilizando la tecnología en el aula. Esta experiencia busca no solo instruir teóricamente, sino también involucrar a los estudiantes con ejemplos de la vida real.
El objetivo principal de este tipo de aprendizaje es asegurarse de que los estudiantes comprendan realmente la información en lugar de simplemente memorizarla para pasar una prueba. Se trata de mantenerlos comprometidos con la experiencia educativa.
Puede que te preguntes si vale la pena implementar el aprendizaje interactivo en tus clases, ya que puede parecer que requiere más trabajo que los métodos tradicionales. Sin embargo, es importante considerar lo siguiente:
1) El aprendizaje interactivo es más divertido y cuando los estudiantes se divierten, se interesan más. Esto los hace sentir más seguros en clase permitiendo que se expresen con facilidad, ya que se sienten escuchados y valorados.
2) Los alumnos desarrollan habilidades tanto técnicas (duras) como sociales (blandas). Aprenden a pensar de manera analítica y crítica, fomentando la creatividad y la imaginación. Estas habilidades son fundamentales para el crecimiento personal y para buscar empleo.
3) El aprendizaje interactivo permite a los estudiantes comunicarse efectivamente, una habilidad importante tanto en el ámbito laboral como en la vida en general.
4) Es una forma flexible de educación, ya que establece una comunicación bidireccional. Escuchar a los estudiantes te permitirá saber si estás logrando tus objetivos y realizar ajustes en tiempo real.
Aquellas escuelas que utilizan este enfoque son entornos en los que se da importancia a la atención y la participación. No pierdas esta oportunidad de hacer tus clases más interesantes, emocionantes y divertidas.
El Centro de Educación Internacional ARMA da la siguiente guía para que no pierdas ni un minuto:
a) Fomenta la participación.
b) Haz preguntas que estimulen respuestas y discusiones.
c) Emplea medios didácticos que generen respuestas y capturen la atención del estudiante.
d) Crea un buen ambiente de grupo.
e) Inclúyete en las actividades para que seas uno más del grupo sin olvidar que eres quien guía toda la experiencia.
Aquí te presentamos 9 actividades que puedes realizar:
1) Lluvia de ideas: Invita a los alumnos a compartir pensamientos creativos y diferentes ideas en sesiones de grupo.
2) Piensa, busca una pareja y comparte: Plantea un problema o pregunta que genere diferentes puntos de vista. Haz que los alumnos discutan en parejas y luego compartan sus conclusiones en el grupo.
3) Sesiones "buzz": Agrupa a los estudiantes en sesiones centradas en un tema específico, donde cada uno pueda compartir pensamientos e ideas y aprender de las experiencias de los demás.
4) Proceso incidental: Presenta a los estudiantes un problema real y divídelos en grupos más pequeños para que encuentren una solución.
5) Sesiones de preguntas y respuestas: Antes de dar tu clase formal, permite a los alumnos hacer preguntas por escrito y luego responde a todas ellas en clase.
6) El alumno es el maestro: Pídeles a los estudiantes que dirijan la clase y muestren lo que han aprendido utilizando la técnica que prefieran, ya sea resumiendo, haciendo una presentación o dibujando.
7) Tarjetas de tarea: Coloca tarjetas con tareas relacionadas con el tema en varios lugares del aula. Reta a los alumnos a completarlas en un tiempo determinado y ofrece premios a quienes realicen más actividades.
8) Incorpora el arte: Involucra las artes en tu clase, como dibujar, escribir poemas, crear canciones o representar ideas relacionadas con el contenido estudiado.
9) Clases con tecnología: Aprovecha la tecnología en tus clases utilizando vídeos, presentaciones virtuales y juegos educativos que los estudiantes disfrutan y conocen bien.
Sin embargo, debes tener en cuenta que este enfoque de enseñanza no es aplicable a todos los conceptos y puede generar algunos problemas tanto para los alumnos como para los docentes:
a) Fiabilidad técnica: Involucrar a la tecnología en el aula es siempre un reto, ya que, si no estás familiarizado, puede darte problemas. Si los dispositivos no funcionan adecuadamente, las clases se verán interrumpidas y con ellas, el aprendizaje.
b) Tiempo: Este tipo de aprendizaje necesita tiempo para planificar y comprender las herramientas.
