Índice de contenidos:
09 de septiembre | 2024
Sí, en España puedes trabajar como autónomo y al mismo tiempo por cuenta ajena. A esta situación se le llama pluriactividad y permite que una persona pueda tener un empleo en una empresa y, a la vez, desarrollar su propio negocio o actividad profesional como trabajador independiente, cotizando en ambos regímenes de la Seguridad Social.
Te explicamos en este post cuáles son las obligaciones fiscales y de cotización si ejerces la pluriactividad. Encuentra aquí también los beneficios, retos y desventajas de combinar ambas actividades así como 3 consejos que te pueden ayudar si es este tu caso. Si bien la pluriactividad te permite diversificar ingresos y desarrollar nuevas habilidades, también tendrás que gestionar una mayor carga de trabajo que puede afectar tu bienestar.
Sigue leyendo y aprende cómo combinar con éxito estas dos formas de trabajo con una buena gestión de tu tiempo y recursos.
La situación de trabajar por cuenta ajena y ser autónomo a la vez es lo que se conoce como pluriactividad. Ocurre cuando una persona cotiza a la Seguridad Social en dos regímenes diferentes: el Régimen General (empleo por cuenta ajena) y el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). Así, puedes tener un empleo en una empresa y, al mismo tiempo, trabajar de forma independiente en tu propio negocio o prestando servicios a clientes.
Para entender un poco más de qué se trata, te dejamos un ejemplo: un periodista puede trabajar en un medio de comunicación (por cuenta ajena) y, al mismo tiempo, ofrecer servicios de redacción SEO como freelance (autónomo). Bajo esta circunstancia, un trabajador tiene dos fuentes de ingresos pero también dos regímenes de cotización diferentes.
Trabajar como autónomo y por cuenta ajena implica cumplir con las obligaciones fiscales y de cotización a la Seguridad Social.
a) Obligaciones fiscales: Se deben declarar los ingresos de ambas actividades por separado.También es posible que debas ejecutar la declaración del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) de manera detallada según el volumen de ingresos.
b) Cotización a la Seguridad Social: Se debe cotizar tanto como empleado (Régimen General) como por autónomo (RETA). Para evitar una doble cotización excesiva para quienes ejercen la pluriactividad, existen algunas deducciones y bonificaciones.
- Reducción de la cuota de autónomo: Si una persona inicia su actividad como autónomo mientras trabaja por cuenta ajena, puede beneficiarse de una reducción en la cuota de autónomos durante los primeros meses.
- Devolución de cotizaciones: Se puede solicitar la devolución de una parte de las cotizaciones si estas superan ciertos límites establecidos por la ley. Esto depende de los ingresos y del tiempo que se mantenga la pluriactividad.
Estas bonificaciones varían según la base de cotización y si el empleo por cuenta ajena es a jornada completa o parcial.
Legalmente, no hay restricciones para combinar un empleo por cuenta ajena con actividades como autónomo. Sin embargo, es importante considerar:
- Contrato laboral y cláusulas de exclusividad
Algunas empresas incluyen cláusulas de exclusividad en los contratos, impidiendo a los empleados realizar actividades profesionales fuera de su trabajo habitual. Es necesario revisar el contrato y, si existe esta cláusula, negociar con la empresa para eliminarla o flexibilizarla.
- Conflicto de intereses
Aunque no exista una cláusula de exclusividad, se debe evitar cualquier situación de conflicto de intereses. Por ejemplo, no es ético trabajar en una empresa de consultoría y ofrecer los mismos servicios a los clientes de esa empresa de manera independiente.
Si decides combinar ambas actividades, podrás disfrutar de estas ventajas:
1) Diversidad de ingresos
Tener dos fuentes de ingresos puede proporcionar mayor estabilidad financiera. Si una de las fuentes se reduce o se pierde, la otra puede ayudarte a mantener tu nivel de vida.
2) Desarrollo personal y profesional
Combinar un empleo fijo con un trabajo como autónomo permite adquirir nuevas competencias y habilidades. El empleo fijo aporta estabilidad y experiencia, mientras que el trabajo autónomo fomenta la creatividad o la capacidad de autogestión.
3) Flexibilidad para emprender
Muchas personas utilizan la pluriactividad para probar ideas de negocio antes de dedicarse a ellas de forma exclusiva. Así, pueden evaluar el mercado y construir una base de clientes sin perder la seguridad de un salario estable.
La pluriactividad también tiene inconvenientes que debes tener en cuenta:
1) Carga excesiva de trabajo
Combinar ambas actividades puede llevar a una carga de trabajo excesiva, dificultando la desconexión y el descanso. Puede, por tanto, afectar tu salud mental y física, por lo que es crucial gestionar el tiempo de manera efectiva.
2) Complejidad administrativa
Manejar las obligaciones fiscales y de cotización puede ser complicado. Es necesario llevar una contabilidad clara y organizada para cumplir con las obligaciones tributarias y evitar sanciones.
3) Doble cotización
Aunque existen bonificaciones, la doble cotización puede afectarte económicamente, especialmente si los ingresos como autónomo no son significativos. Es importante, por tanto, analizar si te merece la pena esta carga.
Si decides combinar ambas actividades, estas 3 recomendaciones pueden ayudarte:
1) Planifica tu tiempo: Establece un horario para ambas actividades y respétalo. Es fundamental dejar tiempo para la vida personal.
2) Infórmate sobre tus obligaciones fiscales: Conoce bien tus obligaciones fiscales y de cotización. Si tienes dudas, consulta con un asesor.
3) Evalúa tu capacidad de gestión: Antes de comenzar con la pluriactividad, analiza si realmente puedes manejar ambas actividades sin comprometer la calidad de tu trabajo o tu bienestar.