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13 de junio | 2023
Los juegos didácticos te permiten, como docente, enseñar a tus alumnos cualquier asignatura de forma más divertida. Al ser capaces de incentivar cada uno de los sentidos de tus estudiantes, vas a generar un aprendizaje mucho más inclusivo. Podemos encontrar, así, juegos ecológicos, es decir actividades lúdicas que nos ayudan a entender y tomar conciencia sobre la importancia del cuidado del medioambiente y la naturaleza.
En este artículo vas a poder encontrar 5 juegos, tanto para aula como para enseñar al aire libre, que te permitirán educar sobre la importancia del reciclaje y la conservación medioambiental. Además, te presentamos una serie de acciones o estrategias eficaces que puedes poner en práctica en casa educando a tus hijos en la necesidad de cuidar nuestro planeta y preservarlo para futuras generaciones.
Sigue leyendo y haz que tus hijos o alumnos tomen conciencia del medioambiente mientras se divierten.
Uno de los principales logros docentes es la posibilidad de educar con herramientas que también diviertan. Para enseñar sobre medio ambiente de una manera sencilla y amigable, te proponemos estos cinco juegos didácticos:
1. El dado de la naturaleza
Para que el dado de la naturaleza sea efectivo, el estudiante debe crear un cubo con una cartulina. Copiar en cada lado las siguientes palabras: fuego, tierra, aire, agua, plantas y animales. El siguiente paso es efectuar una especia de recorrido en un tablero con diferentes colores. Los alumnos deben lanzar el dado y decir algo incorrecto y correcto en función a la palabra del dado. Si al tirarlo, sale la palabra agua puedes tomar el siguiente ejemplo:
- Lo correcto: Es un recurso natural renovable muy valioso.
- Lo incorrecto: No racionar en casa.
2. Carrera de reciclaje
Los niños deben aprender desde muy chicos sobre la importancia de reciclar. La mejor forma de fomentar esta actividad es por medio de competencias. El ganador se llevará un premio, el que quiera entregar el colegio o el profesor. Ganará el estudiante que logre reciclar la mayor cantidad de residuos en el menor tiempo posible, o aquel que logre reciclar y separar de forma correcta cada uno de los materiales recogidos.
3. Desfile de flores
El desfile de flores consiste en pintar macetas con los colores preferidos de los estudiantes. Premia la creatividad de cada uno de ellos si es necesario. Pueden hacerlo solo, en pareja o grupo, pero si quieres incluir a la familia invita a participar a los padres. Lo mejor es la siembra de una planta en cada maceta. Puede ser una flor o un vegetal comestible. Después, cada chico debe desfilar con su propia creación. Se divertirán mientras aprenden sobre la importancia de las plantas en el medioambiente.
4. Dibujos en papel reciclado
La tarea de reciclar el papel puede ser a simple vista un poco aburrida. Pero si conoces la importancia que esta tarea tiene para la preservación del medio ambiente, buscarás la forma de hacerla mucho más amena. Con este juego, los chicos tendrán oportunidad de crear hojas de papel que podrán reutilizar para plasmar sus propios dibujos.
Hacerlo es tan sencillo como remojar por algunos minutos una hoja de papel periódico. También puedes utilizar papel en desuso o cartas antiguas. Después del proceso de remojo, introduce el papel húmedo dentro de la licuadora. Filtra el agua del resto de papel con un colador.
El siguiente paso es dejar la masa de papel reposando por al menos una hora. Durante ese proceso, coloca un pequeño paño de papel encima, con la intención de absorber los restos de agua. Por último, deja la masa de papel secando el sol. Una vez que esté completamente seco, tus alumnos podrán reusar este material.
5. Basuraleza
Debes conformar varios grupos de niños. Los equipos deben contar con una bolsa de basura. La estrategia es simple… cada uno de ellos debe recoger los residuos que encuentren a su paso en un área determinada. El equipo que logre recoger más desperdicios será el ganador.
La ludificación en la enseñanza medioambiental resulta muy efectiva. Además, en casa se deben reforzar estas prácticas para lograr un mejor resultado. Si los niños están en el hogar, es necesario poner en marcha las siguientes estrategias para cuidar el planeta:
- La separación de la basura en indispensable: Es necesario arrojar cada objeto a su respectivo recipiente. Así será mucho más fácil el proceso de reciclaje. Puedes aprovechar los juegos didácticos medioambientales para descubrir a qué cubo pertenece un desperdicio y qué hacer después de separarlos.
- Utilizar artículos reutilizables: En casa se debe reforzar esa práctica de utilizar productos que se puedan reutilizar. Fomenta desde el hogar el uso de servilletas de tela. Además de ahorrar dinero, tendrás participación en el cuidado del medio ambiente.
- Apagar las luces cuando no las estés usando: Esta tarea es indispensable porque permite el ahorro de energía. Muchas veces nos lo han repetido y la verdad es que la técnica funciona perfectamente bien.
- No dejar los grifos abiertos: Los niños deben aprender a cerrar los grifos cuando no están en uso. De esta manera, estarás reduciendo el consumo excesivo del agua, un recurso cada vez más escaso en el planeta. El ahorro también ayuda a mejorar el ecosistema.
- Plantar árboles: Los árboles son importantes por su capacidad para producir oxígeno. Por lo mismo, debes lograr que tu hijo ayude a sembrar alguno en casa o en cualquier lugar del vecindario.
- Utiliza el transporte público: Los vehículos son los principales productores de dióxido de carbono. Usar transporte público reduce la cantidad de coches en la calle y el nivel de contaminación. Enseña a tus peques la importancia de esta práctica para el respeto de la naturaleza.
- Respetar las áreas verdes: Visita los parques con frecuencia y háblale a tus hijos sobre la importancia de las áreas verdes para el ecosistema. Edúcalos para que no arrojen desperdicios en las calles y recojan los desechos de las mascotas. Si por alguna razón transitas con tu peque por un área contaminada, háblale sobre lo peligroso que puede ser este tipo de escenarios para la supervivencia de los seres vivos.