¿Qué es una excedencia laboral en España?
Una excedencia es el periodo de tiempo en el que un trabajador deja de prestar servicios a su empresa, pero mantiene un vínculo laboral. No implica una baja definitiva, sino un cese temporal del contrato. Durante ese tiempo, el trabajador no cobra salario, no cotiza a la Seguridad Social y no acumula paro.
En España existen distintos tipos de excedencia:
a) Excedencia voluntaria: el trabajador puede solicitarla sin necesidad de justificar un motivo concreto. Tiene que haber trabajado al menos un año en la empresa. Puede durar entre 4 meses y 5 años. El derecho a reincorporarse no está garantizado a tu mismo puesto, solo tienes preferencia si hay vacantes.
b) Excedencia por cuidado de hijos: se puede pedir hasta que el hijo cumpla 3 años. Aquí se conserva el derecho a volver al mismo puesto si se solicita dentro del primer año.
c) Excedencia por cuidado de familiares: para cuidar a familiares hasta segundo grado con enfermedad grave o dependencia. Puede durar hasta 2 años.
d) Excedencia forzosa: obligatoria si se accede a un cargo público incompatible con el trabajo. Se conserva el puesto de trabajo.
La naturaleza del tipo de excedencia es clave para determinar si tienes derecho a cobrar el paro.
¿Qué condiciones se deben cumplir para cobrar el paro?
En términos generales, para cobrar el paro en España no basta con estar sin trabajar. El SEPE exige una serie de requisitos legales:
1) Estar en situación legal de desempleo: esto significa que no trabajas por causas ajenas a tu voluntad (por ejemplo, despido, final de contrato, ERE…). Si tú eliges dejar de trabajar (como en una excedencia voluntaria), no estás legalmente desempleado.
2) Haber cotizado al menos 360 días en los últimos 6 años: estas cotizaciones deben ser por trabajo por cuenta ajena.
3) Estar inscrito como demandante de empleo en el SEPE.
4) Estar disponible para aceptar ofertas de empleo y participar en acciones de formación o inserción laboral.
Esto es importante: el simple hecho de estar sin ingresos durante una excedencia no genera derecho al paro. Para que el SEPE apruebe tu solicitud, tienes que haber perdido el empleo involuntariamente y no estar vinculado a una relación laboral suspendida (como ocurre en una excedencia).
¿Se puede cobrar el paro durante una excedencia voluntaria?
La respuesta general es NO.
La excedencia voluntaria no da derecho al paro porque no estás en situación legal de desempleo. Tú decides dejar de trabajar temporalmente, pero tu contrato sigue 'vivo', aunque suspendido. Es decir, no estás ni despedido ni desempleado, sino en una pausa laboral. Además, durante la excedencia voluntaria no cotizas a la Seguridad Social, por lo que no generas nuevos derechos. Si ya tenías paro acumulado, tampoco puedes usarlo, porque todavía estás vinculado a tu empresa y no has perdido tu puesto por causas ajenas.
Ejemplo práctico:
Imagina que trabajas en una empresa desde hace 5 años y decides pedir una excedencia voluntaria de un año para hacer un máster. Durante ese año, no trabajas, pero tampoco puedes cobrar el paro, porque fue una decisión personal y el contrato no se ha extinguido.
¿Hay excepciones?
En general, no. Pero existe un caso en el que sí podrías cobrar el paro durante una excedencia voluntaria: si durante ese tiempo encuentras otro empleo, y ese nuevo contrato finaliza de forma involuntaria (por despido o fin de contrato temporal). En ese caso, podrías solicitar el paro derivado de ese último trabajo, siempre que hayas cotizado al menos 360 días y cumplas los demás requisitos.
¿Y durante una excedencia por cuidado de hijos o familiares?
Aquí la situación cambia, aunque sigue siendo compleja. En principio, tampoco se puede cobrar el paro durante una excedencia por cuidado de hijos o familiares, porque tu contrato sigue suspendido y se entiende que estás dedicado al cuidado de una persona dependiente, no en búsqueda activa de empleo.
Sin embargo, hay algunas situaciones concretas que podrían permitir acceder al paro:
- Si la empresa cierra o te despide durante la excedencia, entonces sí puedes solicitar el paro porque se rompe la relación laboral y ya estarías en situación legal de desempleo.
- Si has trabajado en otro empleo durante esa excedencia, y ese segundo contrato finaliza involuntariamente, podrías cobrar el paro derivado de ese nuevo empleo (igual que en el caso de la excedencia voluntaria).
Además, algunos tribunales han reconocido el derecho al paro en casos excepcionales, por ejemplo, si la persona que se cuidaba fallece y ya no se justifica la excedencia. Pero son situaciones poco comunes y dependerá de cómo el SEPE valore tu caso.
¿Qué pasa si me despiden mientras estoy en excedencia?
Este es un punto muy importante. Si te despiden (o no te renuevan) durante el periodo de excedencia, la situación cambia por completo.
- Sí puedes cobrar el paro, siempre que tengas cotizaciones suficientes y cumplas los requisitos generales del SEPE.
- El motivo es que se rompe la relación laboral, y ya no hay una suspensión del contrato: directamente has perdido tu trabajo por causas ajenas a tu voluntad, lo que sí es una situación legal de desempleo.
Ejemplo:
Estás en excedencia voluntaria desde hace un año y tu empresa decide cerrar o eliminar tu puesto. Te notifican el despido. En ese momento, puedes ir al SEPE y solicitar el paro, presentando la carta de despido y el certificado de empresa.
Es importante que te des de alta como demandante de empleo y solicites la prestación en los 15 días hábiles siguientes al despido.
Alternativas si no se puede cobrar el paro
Si estás en excedencia y no puedes cobrar el paro, no todo está perdido. Aquí te dejamos algunas opciones:
1) Buscar otro empleo durante la excedencia
Puedes trabajar para otra empresa mientras estés de excedencia (si tu contrato lo permite). Si ese empleo finaliza de forma involuntaria, podrías tener derecho al paro por ese nuevo trabajo.
2) Solicitar ayudas o subsidios
En algunos casos (por ejemplo, rentas bajas, cargas familiares, mayores de 52 años, etc.), puedes acceder a subsidios no contributivos. Consulta en el SEPE si cumples los requisitos.
3) Pedir reincorporación anticipada
En algunos tipos de excedencia, puedes pedir volver antes del tiempo previsto. Si la empresa no te admite o te despide, se puede abrir la puerta a solicitar el paro.
4) Solicitar orientación laboral o formación gratuita
Durante la excedencia puedes apuntarte a cursos gratuitos del SEPE o de otras entidades. Esto puede ayudarte a reinsertarte en el mercado laboral cuando termine tu excedencia.